Quiero destacar en esta ocasión a una persona que siendo muy sencilla, lleva la humildad en su corazón, lo refleja en su rostro de mujer, funcionaria y tía de los 1300 alumnos de nuestro liceo.
Ella nunca se jacta de lo que hace, siempre da todo a cambio de nada; brinda amor al que está triste, da esperanza al desolado, da de su pan al que no tiene.
Ella, no crean que por su carácter no tiene dificultades en su vida; no es así, pero Dios le ha dado fortaleza para llegar cada día a su lugar de trabajo, con la calma que la caracteriza, poniendo armonía y entregando amor.
Este humilde homenaje es para la Señora "LUISA".
Gracias Señora Luisa por hacernos sentir como si fuéramos sus hijos.
(Por Carlos González 2*D)
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